Situado a escasos pasos del anfiteatro, el Museo de las Culturas taurinas es único en Francia. Obras de arte y objetos de la vida cotidiana evocan, en él, la tauromaquia y la corrida camarguesa, tradiciones tauromáquicas tanto regionales como internacionales.
El Museo de las Culturas Taurinas vive al ritmo de las exposiciones temporales, puntuadas por las ferias nimesas.
Abrió sus puertas en 2002, y ofrece al público la posibilidad de descubrir cómo la identidad nimesa ha tejido un vínculo indisoluble con el toro y la tierra de Camarga.